viernes, 3 de enero de 2014

'Dame el tiempo que me hace falta que prometo invertirlo en caricias en tu espalda'



      Mal presagio me daba el final de mi 2013, cuando mirara donde mirara siempre había alguien que me juzgara con una mirada penetrante. Incluso la gente de mi alrededor; me planteaba ultimátums sin ningún sentido. ¿Por qué tengo que elegir? Y simplemente después de todo aquello me prometí que jamás pensaría si algo está bien o está mal, simplemente seguiría lo que sintiera mi corazón.

Por esa razón el tiempo avanza tan rápido, apenas cuando empiezo a disfrutar de verdad se esfuma. Un beso lleva a otro, a una caricia, una cálida mirada. Y cuando llega la despedida vuelve a encenderse el deseo; tu aliento en mi cuello, la respiración entrecortada y tus suaves manos por todo mi cuerpo. No puedo pedir más, y es que jamás habría creído que existían tantos sentimientos y que podía sentirlos a la vez. Tal vez sea porque eres tú, tal vez es que de verdad me complementas. Necesito robarle todos los segundos al tiempo, y simplemente tenerte, sentirte... ese es mi deseo de nuevo año.  Para que nunca más crea que todo está perdido, porque de haberlo pensado no te habría encontrado. Y cada día doy gracias porque 'algo' te dijo que debías intentarlo, que esto vale la pena, y que quizás solo había que arriesgar para ganar.


Espero que me ayuden las palabras, aunque de ninguna manera son sólo eso; quiero ser quien te acompañe para lo bueno y para lo malo y con quien desees perderte cada día. Te pienso, te sueño y no se me borra la sonrisa de la cara. Ahora que has entrado no quiero dejarte salir, me has completado y tengo la certeza de que no me vale otra ficha; aposté todas las que podía jugar, y en esto del azar creo que no me ha ido tan mal.








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