jueves, 29 de diciembre de 2011

Amor descafeinado

"Un mensaje nuevo". Abrir. Él. ¿Él? Sí. Después de un mes y medio de completa indiferencia y pasividad mi móvil sonreía; pero ciertamente preferiría que no lo hubiera hecho. Volvían las ilusiones, pero aquel mensaje llevaba esperando respuesta más de dos horas, por lo que una respuesta no tendría sentido. No podía dejarlo así. Intenté arreglarlo... pero de nuevo recibí un batacazo. Un jarro de agua fría. Nadie puede pretender utilizar a una persona para cuando se quiera; o lo tomas o lo dejas.


Me daría ciertos consejos a mí misma, pero nunca los acato. Debería desentenderme. Completamente. Sería necesario un cambio de aires, o simplemente evadirme y hacer aquello que más me gusta, para olvidar, simplemente eso. Pero hay ciertas cosas que son imborrables; estos últimos meses, he tenido comportamientos impropios, de los cuales nunca estaré orgullosa, pero la gente siempre me los tendrá en cuenta, incluso mi subconsciente. Y con ciertos asuntos, simplemente no sé qué hacer. Aprovecharé el cambio de año, para llevar a cabo el refrán: "AÑO NUEVO, VIDA NUEVA"









No hay comentarios:

Publicar un comentario